La mayor tragedia de la minería asturiana en el siglo XXI despierta indignación: "Fallaron medidas básicas"
La explosión en el yacimiento de Cerredo ha dejado cinco muertos y cuatro heridos. Mientras la investigación trata de esclarecer los hechos, crecen las dudas sobre la seguridad de la mina.

Madrid--Actualizado a
Asturias continúa teñida de luto por la explosión en la mina de Cerredo, que dejó cinco fallecidos y cuatro heridos. La principal hipótesis apunta a una bolsa de gas grisú –compuesto principalmente por metano y altamente inflamable– como causa del accidente. Los detalles están todavía pendientes de ser dilucidados, pero el sector minero se pregunta cómo es posible que una tragedia de semejante envergadura haya tenido lugar. Este desastre, el mayor en los últimos 30 años en el Principado, vuelve a poner el foco en la peligrosidad de la minería y la desprotección de sus trabajadores.
El grisú es uno de los mayores peligros de quienes trabajan en las minas. Tal y como indica a este medio Blanca Ruibal, coordinadora de Amigas de la Tierra, se trata de un hidrocarburo compuesto principalmente de metano y que se acumula en las paredes. Con el manejo de maquinaria, una chispa puede resultar fatal si la concentración de este gas es demasiado alta.
Para ello, la ecologista señala que la principal manera de prevenir estallidos y acumulaciones excesivas de grisú es la ventilación forzada y galerías de aireación. No obstante, el responsable de Salud Laboral y Seguridad de CCOO Industria de Asturias, Javier Vázquez, apunta que a este medio que solo había ventilación natural en el piso donde sucedió la explosión. Es decir, no contaba con máquinas que soplaran o aspiraran aire para ventilar de manera artificial.
No había ventilación forzada en la zona del accidente, una medida fundamental para evitar acumulaciones de metano
El sindicalista señala que en esa zona solo contaba con permisos para la extracción de materiales. Es decir, que las labores que se iban a llevar a cabo en esa zona no implicaban ningún peligro derivado del grisú ni la explotación de carbón, ya que no contaba con las autorizaciones pertinentes.
Por respeto a los familiares de las víctimas, Vázquez evita sacar conclusiones sin el respaldo de los informes correspondientes, pero varios medios se hacen eco de un supuesto "secreto a voces", en virtud del cual Cerredo continuaría llevando a cabo labores de explotación minera sin permisos. El de CCOO insiste en que por ahora se tratan de conjeturas y que corresponde a las autoridades pertinentes arrojar luz sobre las circunstancias en las que se produjo el accidente.
No debió haber pasado
Hubiese o no prácticas irregulares, el ingeniero técnico de minas Javier Aguado subraya a este diario que Cerredo debía contar con sistemas de ventilación y otras medidas de seguridad en todas las zonas. El experto critica que "fallaron medidas básicas" y enfatiza: "No tendría por qué haber sucedido este tipo de accidente si se hubieran dado todas las garantías de seguridad".
Javier Aguado, ingeniero de minas: "No tendría por qué haber sucedido este tipo de accidente si se hubieran dado todas las garantías de seguridad"
En la misma línea se expresó este lunes Yolanda Díaz: "En el siglo XXI no puede morir nadie así", palabras con las que coincide Vázquez. Este recalca que "es muy triste que se puedan producir este tipo de accidentes" y añade que "no se debería haber producido en las circunstancias que se dio". La ministra de Trabajo remarcó además que "todo el peso de la ley va a recaer sobre posibles responsabilidades".
Yolanda Díaz: "Todo el peso de la ley va a recaer sobre posibles responsabilidades"
La consejera de Transición Ecológica y Industria y Comercio del Principado de Asturias, Belarmina Díaz, aseguró este lunes que el Ejecutivo autonómico se encuentra "absolutamente consternado" y mostró sus condolencias a los allegados de los fallecidos. "Ahora toca acompañar a las familias", declaró, pero también anunció una investigación para esclarecer lo ocurrido.
El oscuro historial del 'rey del carbón'
La mina de Cerredo se remonta al año 1919, entonces gestionada por la empresa Hullas del Coto Cortés, como recuerda Ruibal. En el año 2006 el yacimiento pasó a la administración del empresario Victorino Alonso, conocido como rey del carbón. El Tribunal Supremo (TS) ratificó la condena de prisión que recibió en 2023 por delitos contra los recursos naturales y el medioambiente.
En concreto, el empresario fue condenado a cuatro años de cárcel por explotar sin licencia la mina a cielo abierto de Nueva Julia, en la localidad leonesa de Cabrillanes. Sin contar con permiso, Alonso amplió la actividad hasta unos terrenos protegidos por Red Natura 2000. Además, la Audiencia Provincial de León lo condenó en 2019 a dos años y seis meses de prisión –y más tarde el TS redujo a un año y diez meses– por explotar de manera ilegal la mina El Feixolín en Villablino.
Ese mismo año, Victorino Alonso también fue condenado a dos años de prisión por ordenar la destrucción del yacimiento neolítico en la Cueva de Chaves, en Huesca. Sin embargo, la Audiencia Provincial suspendió posteriormente la condena, por lo que no entró en prisión por este delito.
Los últimos accidentes en la mina de Cerredo
En cuanto a la mina de Cerredo, en 2009 inauguró una explotación interior con un túnel de hasta 60 kilómetros de longitud por el que pueden entrar camiones de gran tonelaje. Así, era considerada una de las más grandes y modernas de España, pero el 15 de julio de 2015 tuvo lugar un accidente mortal; un derrumbe provocó que un picador quedara atrapado y falleciera. El 25 de agosto de 2022 murió un trabajador y otro resultó herido tras perder el control de un vehículo cuando circulaban por el exterior del yacimiento.
A la lista se suman Jorge Carro, Rubén Souto Robla, Amadeo Bernabé, Iván Radio y David Álvarez. Todos ellos comprendían edades entre los 32 y los 54 años. Asturias aguanta el aliento mientras la investigación en curso esclarece los hechos y las responsabilidades. Sin embargo, Aguado matiza que se trata de buscar soluciones más que culpables. "Tenemos que aprender de lo sucedido e intentar por los medios que tengamos a nuestro alcance que no vuelva a acontecer nada parecido", concluye.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.